La CUP ha avisado a ERC este lunes que «no habrá gobernabilidad» si no se despliega desde el primer momento el acuerdo que cerraron semanas atrás ambas formaciones, independientemente de si esto sucede «por activa» o porque ERC «permite un boicot de JxCat». En cambio, se ha comprometido a «garantizar la gobernabilidad» a cambio del despliegue de dicho acuerdo.
Por boca del diputado Xavi Pellicer, los cupaires han dirigido este aviso poco después de que el aspirante de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, y el secretario general de JxCat, Jordi Sánchez, hayan presentado los términos del acuerdo de las dos principales formaciones independentistas.
La CUP no sólo ha exigido a ERC cambios «desde el primer minuto», sobre todo en «aquellos ámbitos en los que se vulneran y se pisotean los derechos más elementales y básicos», como la vivienda, sino que también ha manifestado «preocupación» por que Junts controle los departamentos de Economía, Salud y Territorio.
Pellicer, que ha recordado que «los votos de la CUP no son un cheque en blanco», ha situado a ERC ante un examen, ya que ha planteado que si durante las próximas semanas «no se detiene la represión contra el movimiento en defensa de la vivienda y no se busca y encuentra la manera de retirar la policía militarizada de los desahucios, la CUP no podrá sostener esa mayoría parlamentaria».
