Con Carlos Jiménez Villarejo. El pasado 29 de abril, el fiscal anticorrupción publicó un artículo en el diario El País titulado «Unas pinceladas económicas sobre los Pujol» donde se hacía eco del procesamiento de todo el clan familiar del ex-presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, acusado de crear una «organización criminal» para defraudar a Hacienda. Josep Pujol, uno de los siete hijos de Jordi Pujol y Marta Ferrusola, se ha convertido últimamente en una especie de portavoz familiar. Él fue quien defendió a la familia en el documental de TV3 «Pujol: los secretos de Andorra».
Josep Pujol tiene un perfil en Twitter que no usa mucho, pero de vez en cuando se anima y entra en la batalla dialéctica habitual en la red. Al leer el artículo de Jiménez Villarejo en el perfil de Federalistes d’Esquerres y en el del economista Francesc Trillas decidió replicar con algunos comentarios. «Creer lo que dice Jiménez Villarejo sobre los Pujol es como creer lo que decía Franco sobre Companys. Odio puro», decía en uno de estos tuits. «La opinión de Jiménez Villarejo se fundamenta en la frustración, el odio y la venganza. Nada más que decir», escribe en otro. Pero sí que tenía ‘más que decir’: «El dilema es saber si este artículo lo escribe Jiménez Villarejo o directamente su discípula Belén Suárez» y acto seguido aclara que «la fiscal del caso Pujol es discípula de Jiménez Villarejo».
Jiménez Villarejo escribió el artículo, claro está. No se sabe si el padre de la saga, Jordi Pujol Soley, ha leído los tuits de su hijo. Si lo ha hecho, seguro que habrá refunfuñando por las faltas de ortografía catalana que contienen.
