Hasta seis informes encontrados entre la documentación intervenida en 2017 al comisario jubilado José Manuel Villarejo apuntan a las supuestas maniobras de las cloacas del Estado contra dirigentes independentistas catalanes, según avanza El País.
De hecho, el comisario Enrique García Castaño apuntó en su última declaración ante el juez Manuel García-Castelló por el caso Kitchen, el pasado 14 de diciembre, que la cúpula de Interior del Gobierno de Mariano Rajoy estuvo informada sobre «otros» operativos clandestinos más allá del espionaje a Luis Bárcenas, en referencia, según fuentes próximas al comisario, a la conocida como Operación Cataluña.
Se da la circunstancia que nadie le preguntó por eso, y ni la Fiscalía Anticorrupción ni el magistrado han iniciado pesquisas sobre este operativo al considerar que «no encaja en ningún artículo del Código Penal».
Fuentes policiales de la en torno a García Castaño aseguran en El País que el comisario se refería a la campaña de intoxicación informativa supuestamente gestada dentro del Ministerio del Interior a través de la llamada brigada política para, mediante supuestos informes policiales cargados de graves acusaciones de corrupción, desacreditar a los principales dirigentes del independentismo catalán. «Si le hubieran preguntado más, el comisario habría aportado más datos sobre estas maniobras», según esta misma fuente.
