El mercado del alquiler en Barcelona está sufriendo un terremoto. Mientras por un lado durante la pandemia de la covid-19 se han duplicado los pisos de alquiler disponibles en la ciudad, según datos de la Cámara de Propiedad Urbana de Barcelona, por el otro han bajado los precios -un descenso del 3,1% durante el mes de julio- y sitúan el coste del metro cuadrado en 16,8 euros, un dato moderado que la Cámara asegura continuará a la baja, en una visión de futuro poco halagadora, según apuntan desde el gremio de los propietarios de pisos de alquiler.
La crisis socioeconómica, con los ERTES, el aumento del paro y la suspensión de las actividades presenciales en las universidades, han provocado que los contratos de alquiler no se renueven, dejando una buena parte del parque de vivienda vacío y con el cartel de "Se alquila" colgando. Aún así, en el 22,5% de los hogares de alquiler se ha negociado un aplazamiento de las cuotas o una reducción y se ha llegado a un acuerdo en un 55,2% de los casos.
Portales inmobiliarios como Idealista o Fotocasa han duplicado su oferta, una tendencia que parece que se mantendrá. A modo de ejemplo, el portal inmobilliario Habitaclia ha duplicado la cantidad de pisos vacíos hasta las 11.460 viviendas en sólo ocho meses, mientras que Idealista ha subido su oferta hasta los 17.250. Según un comunicado de la Cámara de la propiedad Urbana de Barcelona, la crisis económica de la covid-19 ha obligado a muchos inquilinos a abandonar sus pisos y poner rumbo hacia sus ciudades de origen, ahora que el teletrabajo lo permite, y muchos estudiantes, ante la imposibilidad de asistir a las clases, han decidido no alquilar.
Por lo que respecta a los propietarios de los pisos de alquiler, la Cámara de la propiedad Urbana ha pedido una reunión con la Generalitat para modificar o atrasar la propuesta de ley de medidas urgentes para contener el precio de los alquileres. La ley, una iniciativa del Sindicat de Llogateres negociada con el Departamento de Justicia de la Generalitat, quiere dar respuesta a una escalada de los precios del alquiler y afecta a más de 500.000 propietarios en Catalunya, pequeños propietarios titulares de una o dos viviendas en alquiler.
Según el Observatorio Metropolitano de la Vivienda de Barcelona, a pesar de que la mayoría de propietarios de pisos de alquiler son particulares con 1,5 pisos de mediana cada uno, un tercio de los pisos de alquiler, el 32,4%, están en manos de grandes tenedores, con más de 10 viviendas cada uno, y el 26,4% pertenecen a propietarios de más de 15 viviendas.
Las administraciones públicas disponen del 16% del parque de vivienda de alquiler.
