Carles Mundó, el exconsejero de Justicia del gobierno de Carles Puigdemont, ha rechazado la desobediencia por sistema y se ha mostrado partidario de ejercerla en función de los beneficios que pueda traer.
En concreto, en una entrevista concedida al Diari de Girona, ha respondido que "la desobediencia tiene sentido si se espera algún beneficio político, y un buen ejemplo es el 1 de octubre". Seguidamente, ha añadido que "si sólo tiene costes y ningún beneficio, parece una estrategia poco útil".
La semana pasada, el presidente del Parlamento de Cataluña, Roger Torrent, dijo que no hay una mayoría independentista "preparada para una estrategia de desobediencia".
"Hay dos planteamientos cada vez más nítidos. Uno basado más en la exhibición de posiciones muy simbólicas pero a menudo de recorrido práctico escaso, y otro mucho más pragmático que analiza las oportunidades que ofrece cada momento político", indica Mundó en referencia a JxCat y ERC, respectivamente.
"Desde esta diferencia es muy difícil hacer una diagnosis compartida de lo que hay que hacer, puesto que en muchos puntos no son compatibles. No se puede basar todo en elementos simbólicos o desobediencias que después no lo son", señala.
Para Mundó el referéndum pactado es "la forma más útil" para "resolver el conflicto". Considera que el Estado "accederá al referéndum cuando cualquier alternativa diferente sea peor para él". En ese sentido, habla de una "mayoría inapelable" que conduzca a esa situación.
Asimismo, sobre la polémica parlamentaria con la inhabilitación de Quim Torra, responde que "la noticia habría sido que ERC aplaudiera unas palabras del presidente de la Generalitat que tenían por objetivo cuestionar el desempeño del presidente del Parlamento".
