La todavía líder de Ciutadans en Cataluña, Inés Arrimadas, ha viajado este domingo a Waterloo (Bélgica) acompañada de diputados de su partido en el Parlamento de Cataluña para "recordarle a Carles Puigdemont que la república no existe y que no es presidente de nada, simplemente un huido de la justicia".
A pesar del viaje hasta la ciudad belga, la portavoz de Ciutadans no ha querido mantener una reunión con el expresidente de la Generalitat.
La primera reacción de Puigdemont fue recordar a Arrimadas que la última representante de Ciutadans que se reunió con él en la casa de la República fue "expulsada" del partido naranja, refiriéndose a Carolina Punset. No obstante, el expresidente invitaba Arrimadas a reunirse con él, "que si me tiene algo a decir, que me lo diga a la cara".
Arrimadas ha acudido a las 11 de la mañana de este domingo ante la puerta de la residencia del expresidente con una gran pancarta en la cual podía leerse: "La República no existe, Puigdemont". En declaraciones a los medios, ha asegurado que Ciutadans va a Waterloo a "hacer lo que el gobierno de España no hace". Ha pedido al Gobierno socialista que deje de tratar Puigdemont "como un juefe de Estado de un país independiente". También ha pedido al expresidente que "se entregue" a la justicia.
La visita de Arrimadas a Waterloo no ha gustado ni al PP. Cuando la líder catalana de Cs anunció su intención, el presidente del PP de Cataluña, Alejandro Fernández, lo lamentaba al considerar que la dirigente de Cs ha entrado en una "competición de carteles" con "el rey del populismo", como ha cualificado a Puigdemont.
