El PSC está convencido de que hay una estrategia calculada de las fuerzes independentistas, interesadas en alimentar el debate sobre si habrá cargos electos socialistas que quieran participar en el referéndum independentista del 1 de octubre, y, sobre todo, si estos cargos electos sufrirán algún tipo de persecución por parte de la dirección de su partido. «Quién quiere que haya movida en este sentido es Junts x Sí, y en especial el PDECat, y nosotros no queremos entrar en este juego», dicen fuentes próximas a la cúpula del PSC.
Sobre la mesa está la cifra de los 51 alcaldes socialistas que gobiernan ayuntamientos que se han adherido a la Asociación de Municipios por la Independencia, la AMI. Son 51 municipios de los 787 que forman parte de la AMI, de un total de 948 municipios que hay en todo Cataluña. Se especula que estos 51 alcaldes pueden acabar apoyando la convocatoria del 1 de octubre, por ejemplo permitiendo que se pongan urnas en instalaciones municipales.
LA AMI «POR IMPERATIVO LEGAL»
Lo que no se pone sobre la mesa, pero, es que de esta cincuentena de ayuntamientos con alcaldes del PSC, un número importante están en la AMI «por imperativo legal«, según fuentes socialistas, obligados por pactos de gobierno con ERC, el PDECat o la CUP, o por pactos multicolor en los que la gobernabilidad depende de fuerzas independentistas. En estos casos, los ayuntamientos están inscritos en la AMI, pero los alcaldes «no tienen ninguna intención de apoyar una consulta que no tenga el visto bueno de la legislación vigente«.
Para los socialistas catalanes, «la línea roja es la ley«, y para dejar muy clara su posición como partido en las conclusiones del argumentario que ha hecho llegar a sus electos dice que «no participaremos en un referéndum de estas características, ni prestaremos nuestro apoyo político o colaboración institucional a los que pretendan organizarlo«. El PSC añade en este documento el hecho que «en este sentido, si el gobierno de Cataluña pide la colaboración a otras administraciones (ayuntamientos) exigiremos que lo haga de forma oficial y por escrito, debidamente firmado por el responsable que corresponda, y antes de tomar cualquier decisión al respecto, pediremos un informe escrito y firmado por el secretario de la corporación». Los socialistas catalanes concluyen que «protegeremos el funcionariado para que no se les exija que colaboren con ninguna iniciativa que no tenga cobertura legal (en el ejercicio de las funciones públicas)».
SIN SANCIONES
A los que quieren ver alcaldes socialistas sancionados por haber apoyado la consulta del 1 de octubre, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, en declaraciones a TV3 les ha lanzado un cubo de agua fría cuando ha asegurado, sobre posibles sanciones: «No creo que las haya, porque entre otras cosas las tendría que proponer yo y no lo pienso hacer«. De este modo, Iceta ha desautorizado también al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que dijo en La Sexta que los alcaldes del PSC que quieran participar en el referéndum como cargos electos «por supuesto que serán sancionados«.
Las declaraciones de Pedro Sánchez se interpretan como la necesidad que tiene el PSOE de «marcar musculatura» en contra del referéndum catalán al resto de España, pero en el PSC las declaraciones de Sánchez no han caído nada bien.
A pesar de todo, el líder de los socialistas catalanes ha insistido en el hecho de que «lo único que me sabe mal es que haya algún electo que por exceso de celo, ingenuidad o de ganas de colaborar salga perjudicado desde el punto de vista jurídico y legal». Lo que sí que garantizan desde el PSC es que el PSOE no tiene ninguna autoridad para imponer ninguna sanción a los militantes socialistas catalanes.
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