Cada vez hay más ciudadanos que utilizan los servicios de Renfe, la operadora de los servicios de Cercanías de Cataluña, Alta Velocidad y Larga Distancia. Desde principios de año, un total de 98.176.000 viajeros han utilizado este servicio, un 1,3% más respecto a las cifras del año anterior. Este año, 1.260.000 ciudadanos que antes utilizaban otros métodos de transporte, han decidido utilizar el tren.
Renfe está registrando una evolución positiva y ascendiente respecto a los años anteriores. A hora punta matinal y dentro de la primera zona metropolitana, el servicio ofrece 100.000 plazas, con una puntualidad del 93%. Del total de viajeros, 90 millones lo utilizan para la movilidad interna, es decir, tanto el origen como el destino corresponden a poblaciones catalanas.
Un punto a favor de los trenes de Renfe son los 470 millones de euros que se ahorran anualmente en costes externos, de los cuales 200 corresponden al cambio climático, y 110 a la contaminación atmosférica local, aproximadamente. También se ahorran 1,33 millones de toneladas de CO2 y 2 millones de autobuses. Otro dato a tener en cuenta es que el número de viajeros de Renfe equivale a 91 millones de circulaciones en coches.
Por otro lado, en cuanto a las infraestructuras del servicio ferroviario, no son tan elogiables. En este sentido, el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, ha anunciado que el próximo 26 de octubre se celebrará «un gran acto de país» para denunciar «una situación inaceptable» del servicio y para «reclamar el traspaso total de manera inmediata«.
El acto, que está impulsado por el Gobierno, la Asociación Catalana de Municipios (ACM) y la Federación de Municipios de Cataluña (FMC), estará encabezado por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. «Los ciudadanos de este país no se merecen unas infraestructuras ferroviarias en un estado tan deplorable«, ha afirmado Rull, el acto servirá para «dar una alternativa de país y es que queremos gestionarlo nosotros; la Generalitat está en condiciones de hacerlo mejor que Adif«.
Paralelamente, el departamento de Territorio y Sostenibilidad presentará un recurso contencioso administrativo contra Adif, porque no ha cumplido los compromisos de inversión en la red ferroviaria. El objetivo es el de defender unos derechos que, según Rull, «no son de la Generalitat de Cataluña ni de los ayuntamientos; son los derechos de los ciudadanos de Cataluña que son los que disponen de un sistema ferroviario que no es el adecuado para el siglo XXI».
