Albert Ballesta, el hombre que ha sustituido a Carles Puigdemont al frente del Ayuntamiento de Girona después de un rocambolesco proceso sucesorio, está a punto de atar un acuerdo para aprobar el cartapacio.
El hecho insólito es que no se prevé que lo cierre con ERC, que presentó una propuesta que CiU no ha aceptado, ni tampoco con el PSC o la CUP, con quien, según el Diari de Girona, el alcalde Ballesta ni siquiera ha mantenido contacto telefónico en ese sentido.
El cartapacio gerundense se aprobará, si todo va como se espera, con las dos fuerzas más marcadamente ‘unionistas’: el Partido Popular y Ciudadanos. El acuerdo prevé una rebaja en el sueldo del alcalde, que pasaría a totalizar 73.000 euros anuales brutos, entre otros puntos.
El pasado viernes, Ballesta tuvo que suspender el pleno en el que se tenía que aprobar su salario porque no tenía apoyos. Ahora, según el mismo diario, intenta atar contrarreloj un acuerdo que le permita sumar 13 apoyos. El entendimiento CiU-PP-C’s es la opción más factible y está bastante adelantado, añade el Diari de Girona.
De momento, sin embargo, no hay nada cerrado, explica la portavoz de C’s Miriam Pujola. Desde las filas cupaires se reprocha a Ballesta, cuyo nombramiento fue muy criticado, que les haya negado el diálogo.
