El presidente de Endesa, Borja Prado, puso en marcha el año pasado un dispositivo para controlar cuál de sus altos directivos pasaba información sobre la eléctrica al diario elConfidencial.
El digital explica que entre los espiados de Endesa figuraban el consejero delegado, Andrea Brentan, el director general de Latinoamérica, Ignacio Antoñanzas o el secretario general del consejo de administración, Salvador Montejo, entre otros para averiguar quién se relacionaba con el director adjunto del diario.
Endesa habría intentado relacionar los teléfonos de sus directivos con otros números que manejava la compañía, entre los cuales los de algunos periodistas.
ElConfidencial publicó, entre el 2013 y 2014, información relacionada con las famosas puertas giratorias entre la eléctrica y exmiembros de los gobiernos del PP y del PSOE como Elena Salgado y José María Aznar.