Junts pel Sí y la CUP han registrado este martes en el Parlament una propuesta de resolución que a insta la Cámara legislativa a «declarar solemnemente el inicio de un proceso de creación del estado catalán independiente en forma de república». Los dos grupos quieren que el texto se apruebe en un Pleno previo al debate de investidura, que se iniciaría el 9-N.
La mitad del hemiciclo favorable a la independencia empieza a asentar las bases del «cuándo y el cómo», que reivindica la CUP para empezar a hablar del «quién». Por eso, previo al debate que tiene que investir el próximo presidente de la Generalitat, el texto que firman los dos grupos «considera pertinente iniciar, en el plazo máximo de 30 días la tramitación de las leyes del proceso constituyente, de seguridad social y de hacienda pública«.
La propuesta de resolución también pide que el Parlament «y el proceso de desconexión democrática no se supeditarán a las decisiones de las instituciones del Estado español, en particular, del Tribunal Constitucional».
Del mismo modo que pasó con el discurso de la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, la bancada unionista ha descalificado la propuesta. Inés Arrimadas (C’s) la ha tildado de «golpe de estado a la democracia», y Eva Granados (PSC), la considera «el peor error político y el más grave» desde la instauración de las instituciones de autogobierno.
