Los reservados de los hoteles Princesa Sofía y Grand Marina de Barcelona son algunos de los lugares escogidos por agentes policiales no uniformados y empresarios catalanes vinculados con el 3%, el supuesto pago de comisiones ilegales a Convergència (CDC), para mantener reuniones discretas, revela El Confidencial Digital.
Los empresarios quieren evitar que el Gobierno de la Generalitat o CDC los identifiquen. Algunos de ellos denuncian, según el mismo digital, que desde que empezaron a explicar como pagaban el 3% han recibido amenazas y no reciben concesiones públicas de la Generalitat.
La misma información señala que la colaboración con la Policía por parte de ejecutivos que admiten los pagos a cambio de adjudicaciones se ha intensificado durante el último mes porque dan por hecho que los nombres de sus compañías aparecerán públicamente y esperan que su cooperación les ayude a reducir su responsabilidad ante la Justicia.
El camuflaje del 3% es uno de los puntos clave del relato de estos empresarios y ejecutivos. Han señalado a los agentes los procedimientos seguidos para esconder los conceptos con que, supuestamente, se abonaban las comisiones. Incluso, algunos de los directivos ha indicado que se facilitaba un número de cuenta desde la Generalitat.
