En una entrevista al diario Ara este último domingo, Jordi Sànchez hacía esta declaración: «Escenario ideal: Junts pel Sí mayoría absoluta y la CUP cuadriplicando los resultados».
Estas palabras han enervado un sector de afiliados de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), que preside Jordi Sànchez, porque hasta ahora había intentado mantener la neutralidad entre las formaciones y sectores políticos partidarios de la independencia.
En realidad, en la entrevista no se le preguntó por su escenario ideal después del 27-S, sino sobre la posibilidad que, en el supuesto de que la mayoría parlamentaria dependa de la CUP, esta última formación exija la renuncia de Artur Mas en favor de Raül Romeva para ser presidente, pero Sànchez no contestó sobre esta cuestión y mostró su preferencia por una mayoría absoluta de Junts pel Sí. De esta manera la elección del futuro presidente ya no dependería de la CUP.
Un destacado miembro de la ANC apunta que si consultaran a los afiliados sobre las preferencias entre Mas y Romeva, ganaría este último y no, precisamente, por el hecho que aparezca como cabeza de lista.
Raül Romeva ya advirtió que en ninguna parte estaba escrito que Artur Mas tenga que ser el presidente y, al parecer, Jordi Sànchez ha optado por pasar de puntillas sobre esta cuestión para evitar otro conflicto en el interior de Junts pel Sí.
