La Policía levanta acta cada vez vuelve a abrir la Atlàntida Barcelona Beach Club. El Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs decidió, el pasado 2 de julio, decretar la clausura temporal de esta discoteca por su exceso de ruido, motivo de buena parte de las quejas de los vecinos. Pero sus responsables la han continuado abriendo, hecho que ha llevado al consistorio a pedir, el 4 de julio, una autorización judicial para precintar el establecimiento y hacer efectiva la clausura.
La Atlàntida Barcelona Beach Club es propiedad del grupo de ocio nocturno surgido en Ibiza Amnesia, encargado de dinamizar el Port Fòrum. Había obtenido su licencia de actividad para este verano en septiembre del 2013 -al final de la temporada anterior- y volvió a abrir el 7 de junio pasado. Desde el Ayuntamiento de Sant Adrià explican que la licencia de apertura estaba condicionada a la aplicación de medidas para paliar la emisión de sonido y que, el día 18, multaron con 1.000 euros a la discoteca por no haber presentado documentación requerida, por no disponer de limitadores de sonido y por exceso de ruido.
El consistorio esgrime, en ese sentido, los resultados de controles sonométricos de la Policía efectuados en junio y julio, así como informes de técnicos municipales sobre la necesidad de la discoteca de tener un limitador-registrador y un sistema con el que se pueda monitoritzar el nivel de sonido. Su intención es revocar la clausura temporal cuando la discoteca demuestre que ha tomado las medidas para no infringir la ordenanza municipal sobre el ruido y las vibraciones y presente toda la documentación relativa al otorgamiento de su licencia.
