En el reciente libro de conversaciones Servir Catalunya, Artur Mas confiesa a su entrevistadora, Teresa Pous, que la ruptura con la chica con la que salía cuando estudiaba cuarto de Económicas en la Universidad de Barcelona «es uno de los peores momentos de mi vida» porque no se atrevió a decirle que la dejaba porque le gustaba otra joven, Helena Rakosnik, con la que años después se casaría.
En el libro no se menciona el nombre de la joven seducida y abandonada por el actual presidente de la Generalitat, pero en una biografía de Mas, Artur Mas, biografia d’un delfí, de la periodista Montserrat Novell, se relata que en aquellos tiempos de universitario salía con una hermana de la difunta ex ministra y ex delegada del Gobierno en Catalunya Julia García Valdecasas y, por consiguiente, hija de Francisco García Valdecasas, quien como rector franquista de la UB (de 1965 a 1968) reprimió el movimiento estudiantil.
En la conversación con Teresa Pous, Artur Mas hace estas confesiones sobre la ruptura con su novieta de juventud:
«Es uno de los peores momentos de mi vida porque, además, la engañé. Siempre me he arrepentido de eso. No le dije la verdad. No le dije la auténtica causa de nuestra ruptura. No le expliqué que había conocido a otra chica y que esta chica me gustaba mucho. Me sabía muy mal lo que estaba pasando y le dije que quería acabar la carrera y que tenía que concentrarme en otras cosas. De esto me he arrepentido siempre. Hacerle daño era inevitable. […] Más adelante, lo que me supo peor de todo fue no haber tenido el coraje de decirle la verdad. Me pareció que, con la verdad, la podía herir más. Sabía que si le decía que rompíamos la relación porque me gustaba otra chica, ella quedaría, además de triste, especialmente dolida. No lo hice con mala fe, pero con el paso del tiempo consideré que lo había hecho por falta de coraje y de honestidad personal. Aunque le habría hecho más daño, habría sido más ético decirle la verdad. A lo largo de los años, no nos hemos visto mucho, pero no hemos dejado de ser amigos. Pudimos rehacer la relación de amistad y ahora somos buenos amigos.»
