Este miércoles ha empezado la recogida de firmas de la campaña Mi voz, mi decisión, una iniciativa ciudadana europea (ECI, por las siglas en inglés) con el objetivo de blindar el derecho a un aborto seguro, gratuito y accesible en la Unión Europea (UE). La propuesta tiene el objetivo de que todas las mujeres de la UE puedan abortar en cualquiera de los países miembros y que las administraciones públicas asuman el coste de la intervención, el desplazamiento y las revisiones médicas necesarias.
La iniciativa nace en Eslovenia, y la apoyan siete países más: Polonia, Francia, Austria, España, Croacia, Irlanda y Finlandia. Activistas y organizaciones de estos ocho países se han unido para coordinar la campaña teniendo en cuenta, principalmente, el panorama político europeo y el auge de la extrema derecha.
«El avance de la ultraderecha y la probabilidad de que las derechas acaben gobernando en Europa han puesto en alerta a todos los países miembros en referencia a los derechos de las mujeres, en general, y muy en particular al derecho al aborto», explican las impulsoras españolas. Concretamente, la iniciativa se basa en cinco puntos:
- Aborto gratuito para las mujeres de países donde esta práctica está casi completamente prohibida, como Polonia y Malta, incluyendo los gastos del aborto y del viaje;
- Aborto gratuito en países donde es legal, pero hay importantes barreras financieras, como por ejemplo Croacia y Austria;
- Aborto gratuito para mujeres con un «falso acceso», es decir, mujeres que viven en países donde abortar es legal, pero se encuentran con barreras como por ejemplo la objeción de conciencia;
- Aborto gratuito para mujeres en situación de vulnerabilidad o marginación, como por ejemplo solicitantes de asilo y migrantes;
- Acceso a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) en cualquier país de la UE, de manera que las mujeres que necesiten abortar en plazos que superan los establecidos por las leyes de cada país, puedan desplazarse en otros territorios de la UE donde la legislación sí que las permita abortar.
La iniciativa necesita recoger como mínimo un millón de firmas de ciudadanos de los ocho países mencionados que la apoyan, para así instar a la Comisión Europea a pronunciarse sobre la cuestión. De este millón, España tendría que recoger, al menos, 250.000 firmas. Las impulsoras de la campaña han hecho un llamamiento para conseguir los apoyos antes de las elecciones europeas que se celebran el próximo 9 de junio.
