La sala penal del Tribunal Supremo ha acordado este viernes no admitir a trámite la querella interpuesta por Manos Limpias y otras dos asociaciones contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y varios ministros por supuestos delitos de usurpación de funciones, prevaricación y cohecho por los acuerdos suscritos entre el PSOE, ERC y Junts sobre la ley de amnistía.
Entre otras cuestiones, la denuncia reclamaba la suspensión cautelar de la proposición de la ley. Sin embargo, los magistrados han rechazado la querella argumentando que los pactos «no pueden ser constitutivos de delitos de cohecho o de negociaciones prohibidas a los funcionarios» porque «se enmarcan en negociaciones de naturaleza política y requieren instrumentos normativos para su desarrollo y ejecución».
Según el Supremo, se trata de acuerdos de carácter político que aún deben desplegarse en forma de leyes, y que pese a la «controversia política, jurídica y social» que generan, «el eventual desacierto, la posible falta de oportunidad, la inconstitucionalidad o la ilegalidad de las iniciativas» que derivan de ella «permanecerán en el campo de la responsabilidad política del legislador».
Además, según los magistrados, «tampoco pueden calificarse como un encubrimiento o colaboración terrorista» porque la tramitación de la ley se realiza de acuerdo con los procedimientos establecidos por la Constitución
Por último, descartan la posible comisión del delito de usurpación de funciones del poder judicial porque la ley se tramita de acuerdo con las potestades legislativas de las Cortes, y, por tanto, «se someterá a los mecanismos jurídicos de fiscalización que reconoce nuestro sistema constitucional».
