Unos treinta sindicatos y organizaciones del movimiento por la vivienda han firmado un manifiesto conjunto en el que denuncian «el aumento de la represión» policial y judicial contra los activistas. En el texto, cargan contra que el «macrodesahucio» que tuvo lugar en el barrio del Raval de Barcelona el pasado 21 de febrero; la ejecución «sistemática» de desalojos con grandes despliegues policiales en Ciutat Vella o en municipios del Maresme; las peticiones de «décadas de prisión» para los encausados en el caso de Olzinelles, en el barrio barcelonés de Sants, o la «militarización» del desalojo del Kubo y la Ruina.
«La conclusión es que los sindicatos cada vez tenemos menos margen para hacer política y defender nuestros derechos y libertades», lamentan las organizaciones, que denuncian que cada vez cuantifican más multas contra los activistas, así como más condenas. «La ofensiva económica contra las condiciones de vida, impulsada por la crisis capitalista en curso, siempre va acompañada de una ofensiva política y cultural el objetivo de la cual es reducir el margen para luchar por la mejora de nuestras condiciones de vida», aseguran.
Con todo, las organizaciones que han firmado el manifiesto hacen un llamamiento a «reforzar la unidad» del movimiento por la vivienda. Entre la treintena de entidades firmantes se encuentran el Sindicat de Llogateres de Cataluña, los sindicatos de vivienda de Poble Sec, Badalona, L’Eixample, Mataró, Nou Barris, el Raval o Reus, así como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Lleida, Sabadell o el Bages.
