Diez personas han sido detenidas este jueves en la decimocuarta noche consecutiva de protestas por la amnistía en los alrededores de la sede del PSOE de Madrid, en la calle Ferraz. Esta vez las protestas han coincidido con el día en que el socialista Pedro Sánchez ha sido investido presidente de España por tercera vez consecutiva.
La concentración de este jueves ha congregado a 4.000 personas, y repitiendo el esquema de otras jornadas, grupos de perfil ultra han ocupado las primeras filas y han empezado a lanzar objetos contundentes contra la línea policial. Los radicales enarbolaban banderas anticonstitucionales, emulaban saludos fascistas y gritaban consignas racistas y homófobas, así como insultos contra el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y el mismo Sánchez.
Las cargas han tenido lugar pasadas las once de la noche y han dispersado a los grupos radicales, que se manifestaban en el mismo lugar donde otros concentrados se han sentado en el suelo para diferenciarse de los primeros. Posteriormente, ha habido disturbios y carreras por las calles próximas a la concentración, durante las cuales se han producido la decena de detenciones y se han incendiado algunos contenedores.
La convocatoria ha sido impulsada por grupos de extrema derecha como Revuelta o el sindicato Solidaridad, vinculado a Vox. De hecho, en un momento de la concentración, justo detrás las vallas, ha hecho acto de presencia el vicepresidente del partido de extrema derecha, Javier Ortega Smith.
