El primer secretario del PSC, Salvador Illa, fue hace unos años el hombre más poderoso de España. La pandemia, la emergencia sanitaria, los duros confinamientos y el estado de alarma hicieron que el presidente español, Pedro Sánchez, estableciera una línea de poder que se apoyaba, casi por completo, en el entonces ministro de Sanidad. Sánchez hizo que Illa fuera el mando único en todo lo que tenía que ver con la pandemia, que durante meses fue absolutamente todo medio mundo. Y esto convirtió al catalán en la persona con más poder del Estado.
Ahora, y salvando todas las distancias, Illa vuelve a ser el hombre más poderoso. Y es que Pedro Sánchez ha ungido a Salvador Illa como el encargado de negociar y dar el visto bueno a todo lo que se pueda negociar sobre Cataluña en el marco de la investidura. Y como las exigencias de los independentistas catalanes y todo lo que rodea al proceso estará en el centro de las negociaciones, Illa tendrá la clave de vuelta del posible acuerdo entre el PSOE y el soberanismo. Además, PSOE y Sánchez se han recreado alabando el papel de Illa en las negociaciones, lo que ha cabreado a Junts, que le considera responsable de la operación que dio la alcaldía de Barcelona a Jaume Collboni y se lo tomó a Xavier Trias.
