El ejército de Israel ha atacado con drones a las instalaciones de la milicia de Hezbolá en el sur del Líbano, en el área disputada de las Granjas de Cheba. La ofensiva se ha llevado a cabo después de que el grupo haya lanzado un ataque con mortero contra Israel en apoyo a Palestina y al grupo islamista palestino Hamás.
Poco antes, Israel ya había atacado el sur del Líbano con artillería en respuesta a disparos desde el país árabe, según portavoces militares: «La artillería de las Fuerzas de Defensa de Israel está atacando actualmente la zona del Líbano desde donde se llevó a cabo un tiroteo». Expertos en seguridad no descartan la posibilidad de que surjan nuevos frentes para Israel, especialmente en la frontera norte con el Líbano, extremadamente volátil, donde operan milicias palestinas y Hezbolá.
Israel ya libró una guerra en el 2006 contra las fuerzas de Hezbolá en el Líbano. Desde entonces, ambos países siguen técnicamente en guerra, separados por la llamada Línea Azul, un límite demarcado por la ONU y todavía custodiado por sus tropas.
