El presidente de la Generalitat de Catalunya, Pere Aragonès, defiende una amnistía que incluya al expresidente, Carles Puigdemont, pero deja fuera a la presidenta de Junts, Laura Borràs. «Su caso nada tiene que ver con el 1-O», ha argumentado en una entrevista en TV3. Asimismo, también ha dicho que la represión no ha caído sobre la policía y que el «problema» es la «represión injusta» contra el independentismo. El jefe del ejecutivo catalán quiere una negociación «coordinada» con Junts y ha celebrado que después de un año en el que ERC «en solitario» ha forzado al Estado, ahora JxCat se apunte a la «vía de la negociación» para resolver el conflicto político, y remarcó que es el partido de Turull y Borràs quien se ha movido.
Aragonès considera que Puigdemont «evidentemente» debe estar incluido en un acuerdo de amnistía, y añadió que será un placer recibirle en el Palau de la Generalitat como se ha hecho con el resto de exiliados. En cambio, ha excluido a Borràs, condenada por su gestión al frente de la Institución de las Letras Catalanas (ILC). «Su partido y su entorno puede considerar que es injusto, pero los hechos nada tienen que ver con el 1-O y una amnistía hace referencia a unos hechos y no a unas personas», ha remarcado.
Asimismo, Aragonès ha excluido a los agentes de policía encausados por el 1-O de un eventual acuerdo de amnistía. «¿Quién está en el exilio? ¿La policía? ¿Quién ha estado en prisión? ¿La policía? ¿Quién tiene el patrimonio de su familia embargado? ¿La policía? No hay ningún policía en el exilio. Enfoquémonos donde está en el exilio. problema, que es la represión injusta del independentismo», ha añadido.
Casi un año después de que Junts se marchara del gobierno catalán, Aragonès cree que la posibilidad de que vuelva a entrar no está sobre la mesa. «Deberían pasar muchas cosas y un Gobierno necesita continuidad. De un Gobierno no se va entrando y saliendo», argumentó. Sin embargo, remarcó que quiere trabajar conjuntamente con Junts «en todos los ámbitos posibles».
