El PSC y Junts han frustrado este viernes la inclusión del plan piloto de renta básica universal en la ley de acompañamiento de los presupuestos del 2023. Los socialistas han mantenido una enmienda al respecto, pese a la petición de retirada por parte de ERC, y han votado a favor de aprobarla en la Comisión de Economía del Parlamento de Cataluña, junto a Junts, Vox, Ciutadans y el PP.
La votación ha evidenciado el desencuentro entre el PSC, principal partido de la oposición, y el único partido en el gobierno, ERC. Los republicanos, además de considerar la votación un exponente de «sociovergencia real», han indicado a los socialistas que en la página 25 del acuerdo por los presupuestos cerrado por estas dos formaciones se establece que no se incorporarían nuevas cuestiones en las votaciones de las cuentas.
«Estamos hablando de un plan piloto que debe servir para que, cuando seamos un estado independiente, podamos aprobar una medida pionera, innovadora y del siglo XXI», ha defendido la diputada de ERC Raquel Sans.
Por su parte, el PSC ha defendido que su posición es coherente con la postura que mantuvieron en esa negociación y que el acuerdo suscrito con ERC no incluía un pacto sobre la ley de acompañamiento.
Sobre el plan piloto, eso sí, la decisión definitiva depende del pleno del Parlamento catalán que se celebrará el próximo viernes, día 10. La formulación de renta universal incluida en la ley de acompañamiento fijaba en 800 euros la asignación mensual para los participantes en el plan piloto -300 euros en el caso de los menores-, y preveía una dotación económica del gobierno para hacerla efectiva cuando la normativa reguladora entrara en vigor.
Por otra parte, la cámara catalana ha aprobado el dictamen final de las cuentas de este año antes de llevarlas a la votación que, previsiblemente, las aprobará en el pleno. En este caso, ERC, PSC y En Comú Podem han votado a favor y el resto de grupos parlamentarios, en contra.
Los socialistas, además, han evitado apoyar las enmiendas presentadas por Junts sobre los macroproyectos del Cuarto Cinturón, Hard Rock y el aeropuerto de Barcelona-El Prat, y han presentado su postura como una muestra de lealtad al acuerdo sobre estas obras suscrito con ERC.
