La Audiencia de Barcelona celebra este martes el primer juicio en España por la difusión de fake news. En el banquillo hay un usuario de Twitter acusado de haber cometido un delito de odio por haber publicado el vídeo de una agresión, grabado por una cámara de seguridad en China, atribuyendo los hechos, y también una violación, a un menor no acompañado (mena) de Canet de Mar.
La Fiscalía pide al acusado una condena de dos años de cárcel y una multa de 6.480 euros, en concreto, por la presunta comisión de un delito contra los derechos fundamentales y las libertades públicas. Le atribuye una difamación «movido por su animadversión y rechazo a los inmigrantes extranjeros de origen marroquí» y destaca que este usuario había difundido en la misma red social comentarios xenófobos y simbología ultra.
El escrito de la Fiscalía refleja que el acusado acompañó el vídeo de un mensaje en el que explicó que el agresor era un “MENA marroquí de Canet de Mar, a estos a los que daremos la paguita hasta los 23 años, los niños de Pedrito Piscinas” y que “después, para más inri la viola, estos energúmenos y estas manadas de marroquíes no saldrán en los medios”.
El vídeo, que rozó las 22.000 visualizaciones, mostraba 45 segundos de una grabación en la que un hombre golpea 15 golpes a una mujer, a la que deja inconsciente y, finalmente, intenta bajar el pantalón. El acusado lo difundió en Twitter coincidiendo con la denuncia de una violación en Canet de Mar.
