TV3 llevaba mucho tiempo sin quedar por detrás de La1 en la noche de los sábados. Sin alcanzar grandes cotas de audiencia, el FAQS que presentaba Cristina Puig conseguía cada semana, con su propuesta declaradamente independentista, más audiencia que el primer canal de la televisión pública española. Sin embargo, esta dinámica se rompió este sábado 24 de septiembre. La gran confusión, presentado por Xavier Sardà, tuvo en Catalunya 125.000 espectadores (un 9,1% de la audiencia) mientras que Col·lapse de Ricard Ustrell tuvo que conformarse con 96.000 espectadores (6,4% de audiencia) .
Está claro que los espectadores actuales de TV3 reclaman dosis continuadas de propaganda independentista y que si se sale de ese guión la audiencia cae en picado. El estreno de Col·lapse, el 17 de septiembre, contó con 174.000 espectadores (11,9% de audiencia). Es decir que entre el primer y segundo programa, perdió casi 50.000 seguidores y 5,5 puntos de audiencia. Tener mayor o menor audiencia no debería tener un peso determinante en la decisión de los responsables de TV3 a la hora de decidir los programas que incluye en su parrilla. La nueva dirección del canal, dirigido ahora por Sigfrid Gras, ha continuado, sin embargo, con la tónica marcada por su predecesor, Vicent Sanchis, que exhibía continuamente como un gran mérito el liderazgo de la audiencia de TV3. Las notas de prensa de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) y las intervenciones de su presidenta, Rosa Romà, y de Sigfrid Gras en la comisión de control de la CCMA en el Parlament resaltan siempre este liderazgo.
Col·lapse ha demostrado en sus dos primeros días de antena una voluntad creativa y un alejamiento de la propaganda política que podrían recuperar para TV3 espectadores que han huido en los últimos años por su sectarismo independentista. Lógicamente, esta dinámica no puede dar frutos de un día para otro. Ustrell ofreció una entrevista con el director de cine Woody Allen que habría merecido un mayor interés por parte de la audiencia. Independientemente del jugo que el presentador supo sacar de la entrevista, lo cierto es que era un acierto periodístico que no fue refrendado por los espectadores.
Parte de la audiencia tradicional del FAQS de TV3 se fue a El fax de 8TV, que le ofrecía el alimento ‘procesista’ que no encontró en Col·lapse. El programa que presentan el exdiputado de Junts Eduard Pujol y la periodista Elisabet Cortiles, con la participación de la incombustible Pilar Rahola -que era fija en el FAQS– pasó de 9.000 a 23.000 espectadores entre los sábados 17 y 24 de septiembre, subiendo de un 0,7% a un 1,5% de audiencia.
Si el único criterio que aplican la CCMA y TV3 para valorar la continuidad de sus programas es el nivel de su audiencia, Col·lapse tendría sus días contados. Pero la apuesta ha sido cara. El programa que realiza la productora de Ricardo Ustrell, La Manchester Radiofónica, fue contratado por la CCMA el 14 de julio por un año y dos meses. El coste del contrato es de 1.489.287,33 euros. Además, la CCMA también ha asumido los gastos de la construcción del decorado del programa, su iluminación y el uso de estabilizadores de cámara. En total, Col·lapse cuesta 1.878.399,13 euros. El FAQS costó un poco menos la temporada pasada: cerca de 1,7 millones de euros.
