El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, apoya a la ministra de Defensa, Margarita Robles, en plena crisis por el espionaje de decenas de personas vinculadas al independentismo. A la salida del Congreso, y tras salvar el plan anticrisis gracias los votos de Bildu, cuando le preguntaron si cuenta con su apoyo, el presidente fue conciso, pero claro: «Por supuesto».
Así, el presidente del Gobierno no se plantea destituir a la responsable política del CNI, que los aliados de la coalición, entre ellos el socio minoritario, han colocado en la diana después de que justificara el espionaje al independentismo catalán en el momento más crítico para el gobierno español con sus socios.
Entre los que pidieron la dimisión de la ministra de Defensa se encuentra el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que pidió ayer el cese de Robles por unas declaraciones inaceptables, en su opinión, que habrían justificado este espionaje.
Una de las compañeras de Robles en el Consejo de Ministros, la responsable de Hacienda María Jesús Montero, ha defendido que la ministra de Defensa «está desarrollando como siempre su labor de forma impecable». «Está haciendo lo correcto y lo que corresponde», ha destacado. «Ojalá pudiera explicarse con más claridad en este momento, porque se aclararían muchas dudas, pero eso hay que hacerlo en la comisión de secretos oficiales», ha señalado la ministra de Hacienda.
