El Departamento de Interior de la Generalitat dejará de aplicar la Ley Mordaza contra los manifestantes pacíficos y contra los periodistas y fotoperiodistas. Así lo ha anunciado el consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, este lunes en una entrevista en Catalunya Ràdio, en la que ha defendido que «no tiene ningún sentido que si uno se moviliza pacíficamente, tenga como consecuencia una sanción, como se ha producido hasta ahora».
Elena ha explicado que se aplicará la ley «ponderando los derechos», de manera que «prevalecerán los derechos fundamentales como el de manifestación, de reunión, de información o la libertad de expresión» sobre la Ley de Seguridad Ciudadana. Según ha señalado el consejero, estos nuevos criterios están amparados por la jurisprudencia del Tribunal de Estrasburgo y del Constitucional, «que dicen que el ejercicio de derechos fundamentales no puede considerarse un delito».
Por otro lado, el titular de Interior ha adelantado que se separará el proceso de denuncia del de instrucción de los expedientes, por lo que los Mossos d’Esquadra levantarán acta de los hechos que se produzcan en las protestas pero será la Dirección General de Administración de la Seguridad quien asuma el proceso de instrucción. Estos cambios permitirán al Govern revertir muchas de las sanciones que se hayan puesto durante los últimos meses si se han presentado alegaciones, como por ejemplo las multas interpuestas contra los colectivos en defensa de la vivienda por intentar detener desahucios, que suman más de 200.000 euros, o las sanciones contra los fotoperiodistas por captar imágenes de los agentes en el ejercicio de su trabajo.
El consejero Elena también ha cargado contra el PSC, al que ha acusado de haberles presionado para «cumplir la Ley Mordaza con el máximo rigor posible» pese a ser un partido «que había defendido que si ganaba (las elecciones) la derogaría». «Me sorprende que se pongan las manos en la cabeza cuando no se aplica de forma restrictiva», ha comentado el titular de Interior.
