El Govern de la Generalitat ha retirado la Creu de Sant Jordi al cura Josep Lluís Fernández Padró, que fue condecorado en 2007 y ahora está jubilado. Así lo detalló la portavoz del Ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, este martes en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell Executiu.
Tras varias denuncias, en mayo, la Archidiócesis de Barcelona envió el caso al Vaticano al considerar que había «indicios fundados de la comisión del delito» por parte del cura y el Govern ha decidido retirarle la Creu de Sant Jordi una semana después de anunciar la concesión de las distinciones de ese año.
Los casos denunciados, abuso a menores, habrían tenido lugar hace más de 40 años y fueron denunciados ante los Mossos d’Esquadra y la iglesia hace unos años.
Fernández Padró, que ha sido misionero en Camerún, participó en la creación del Cuerpo Provincial de Bomberos Voluntarios de Barcelona en 1960 y los de la Generalitat en los años 80.