Albert Batet. El actual presidente del grupo parlamentario de Junts per Catalunya en el Parlamento explica que él iba a pegar carteles de CDC cuando tenía 10 años acompañando a su padre, que ya era dirigente local de Convergencia en Valls.
En una entrevista de verano en La Vanguardia, Batet explica que a pesar de estudiar una carrera universitaria como Dirección y Administración de Empresas con el objetivo de dedicarse a la empresa familiar, nunca ha ejercido, pues sólo terminar los estudios entró de concejal de CiU en el Ayuntamiento de Valls con 24 años, ciudad de la que sería alcalde durante siete años, después de cinco años haciendo de concejal. Así, Batet no ha cobrado un sueldo que no sea de carácter público.
Diputado en el Parlamento de Cataluña desde 2012 (en las listas de CiU, Junts pel Sí y Junts per Catalunya), en la cámara catalana hizo amistad con Carles Puigdemont y ahora es uno de los principales soportes del ex presidente.
En esta misma entrevista reconoce que mantiene una relación de amistad con los socialistas Salvador Illa y Alicia Romero, asimismo con los republicanos Josep Maria Jové y Marta Vilalta. Los cuatro son los máximos responsables de los respectivos grupos parlamentarios.
Batet se muestra «escéptico» ante la mesa de diálogo entre los gobiernos español y catalán, siguiendo la línea marcada desde Waterloo por Puigdemont.
