Cataluña está viviendo un periodo de incendios forestales, muy habituales por el clima mediterráneo. Antes que nada: los únicos responsables de los incendios son los pirómanos que los provocan. Dicho esto, la administración también puede hacer algo más que apagarlos.
Los bosques catalanes, en manos de propietarios privados, no están limpios, lo cual es munición para el fuego. Estos últimos días hemos vivido cómo desde los responsables gubernamentales de la Generalitat y sus acólitos no paran de felicitar a los bomberos por el trabajo hecho. Que hay que agradecer, evidentemente. A pesar de todo, hay que tener presente que el actual gobierno de coalición lleva al frente de la Generalitat desde hace casi 10 años. Durante todo este tiempo, los responsables no han invertido en limpiar bosques.
Los mismos grandes propietarios de los bosques ya llevan alertando hace años del problema. Teniendo en cuenta que al frente de la principal asociación hay un independentista como Josep Maria Vila d’Abadal, este grupo lleva tiempo reclamando a la administración catalana políticas activas de limpieza del bajo-bosque, que antes hacía el ganado y que no ha sido atendida.
Quizás el problema esté más en las malas relaciones entre Junts y Esquerra. Hasta ahora las políticas dependían de diferentes Departamentos: Agricultura, Política Territorial, Medio Ambiente e Interior. Ahora, sin embargo, Teresa Jordà desde Agricultura es la responsable tanto de la agricultura y la ganadería como de preservar el medio ambiente, así como de los Agentes Rurales, lo cual no siempre cuadra en estos dos sectores, muchas veces enfrentados. A la vez, Jordi Puigneró, como responsable de Territorio también tiene mucho que decir. Finalmente, está Joan Ignasi Elena en Interior, con los Bomberos de la Generalitat, responsabilidad última de apagar el fuego, por más que muchas veces tenga el apoyo de los mismos campesinos que con sus tractores labran los campos y proveen de lo que haga falta.
Además, está la falta de inversión de la Generalitat en todo lo que hace referencia a la modernización del material para los bomberos, lo cual depende del Presupuesto. Este gobierno independentista envía a todos sus cargos a estar cerca del incendio y a apoyar a los bomberos, pero el material sigue siendo el mismo.
Solo espero que nadie de la oposición aproveche desgracias personales a causa de los incendios para desgastar al gobierno. Esto ya lo practicó CDC cuando cinco bomberos murieron en el incendio de Horta de Sant Joan en 2010. Entonces, de una forma irresponsable, se intentó judicializar las desgraciadas muertes. Este mes de julio, después de once años, dos de los autores del incendio han aceptado un acuerdo con Fiscalía para cumplir una pena muy inferior. ¡No puede ser que la Justicia sea tan lenta!
