El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, de gira por los países bálticos, ha tenido que volver a responder a las preguntas de los periodistas sobre el independentismo y concretamente sobre el encuentro en Waterloo entre el ex presidente Carles Puigdemont y el exvicepresidente Oriol Junqueras. El dirigente socialista les ha querido avisar que el independentismo no puede continuar «anclado en el 2017».
En la comparecencia conjunta con el primer ministro letón Krišjānis Karins, el presidente del gobierno español reiteró que «su posición es clara», y también su propuesta: la llamada «agenda para el reencuentro». En este sentido, Sánchez ha manifestado su voluntad de «superar el año 2017», y de ahí el indulto a los presos políticos. Pero también ha defendido que el independentismo tiene que «aprender de sus errores» y abrir un «proceso de diálogo con la otra parte de Cataluña», la no independentista.
La cuestión catalana ha sido bien presente en este primer día en Letonia. Instantes antes de la comparecencia, Sánchez ha participado de una ofrenda floral justamente a las víctimas de su guerra de independencia. El acto ha tenido lugar al aire libre, en el Monumento a la Libertad de Riga, y dos ciudadanos han aprovechado para exhibir una estelada. La han mantenido bien visible durante los cinco minutos que ha durado la ofrenda, colocados justo detrás de las delegaciones española y letona.
