La Plataforma SOS Costa Brava prepara una nueva campaña para hacer frente a las operaciones de desarrollo urbano que han obtenido luz verde en el Plan Director Urbanístico (PDU) de revisión de suelos no sostenibles de la costa de Girona que aprobó la Comisión Territorial de Urbanismo de Girona el pasado día 19. Este Plan Director, que tendrá que ser ratificado el mes próximo por la Comisión Territorial de Catalunya, ha sido descrito por esta Plataforma como un «avance» pero «claramente insuficiente para salvar la grave situación urbana en la que se encuentra la Costa Brava».
En la declaración en la que SOS Costa Brava valora el PDU señala que «había pedido al Departamento de Territorio y Sostenibilidad y al Gobierno de la Generalitat más valor y valentía para aprobar desclasificaciones masivas de suelo en todos los sectores urbanizables pendientes de desarrollo y en polígonos urbanos no consolidados». El secretario general de la Agenda Urbana y el Territorio, Agustí Serra,declaró en la presentación del PDU que se trataba de un plan «ambicioso», pero reconoció que «desgraciadamente, no hemos podido ir más allá». Serra destacó que se había impedido la construcción de 15.000 viviendas en varias localidades de la costa de Girona.
SOS Costa Brava valora positivamente la confirmación de la desclasificación del sector Aiguafreda, en Begur, Cala Morisca, Tossa de Mar, y numerosos sectores desarrollables en Begur, Pals, Lloret y otros lugares a lo largo de la costa y la preservación de Pola Giverola, en Tossa de Mar, de la parte considerada Zona de Interés Natural de las Montañas de Begur y Cala Banys , en Lloret. Pero, al mismo tiempo, lamenta no afrontar en su totalidad el problema de las casi 250 nuevas urbanizaciones previstas en la actual planificación de los 22 municipios costeros de Girona, que queden sin protección tres sectores de Blanes y que se deje al margen de este PDU el potencial de crecimiento excesivo en los municipios de Palafrugell, Palamós, Castell Platja d’Aro, Calonge y Castelló d’Empúries. En los últimos cinco municipios se espera la construcción de 9.234 viviendas nuevas.
Los ambientalistas creen que las limitaciones al crecimiento urbano previsto en Cadaqués, Pals y Begur son insuficientes y que se permite de nuevo la construcción de una zona hotelera que había sido desclasificada en L’Escala. Además, entre otras limitaciones del PDU, se quejan de que no ha abordado los problemas derivados de la sobreexplotación de los acuíferos y la falta de agua, no garantiza la preservación de la integridad de los bosques y zonas forestales de la costa y no salvaguarda todos los hábitats de interés comunitario de los bosques de pinos mediterráneos y los hábitats dunares».
La próxima campaña anunciada por SOS Costa Brava tiene como objetivo lograr la protección integral de los últimos recortes de bosques en primera línea de mar en las calas ya urbanizadas y evitar así la destrucción progresiva del pinar de la Fosca de Palamós, la montaña de Sant Sebastià en Llafranc, la pineda y riera del Canadell en Calella de Palafrugell, la pineda y el frente marítimo de Platja d’Aro en la desembocadura del Ridaura, Tamariu Riera de Santa Maria del Llor, los polígonos de Aigua Xelida, la franja litoral entre Port de la Selva y Llançà y la cala de Es Calders en Cadaqués.
Para llevar a cabo sus campañas, SOS Costa Brava recoge aportaciones financieras con las que se enfrenta a los gastos de sus litigios administrativos y judiciales. Para 2020, estos gastos pueden subir unos 70.000 euros. El lema para solicitar estas aportaciones es«Junts podem salvar la Costa Brava».
