Las entidades de defensa de los derechos humanos Irídia, Migra Studium, Tamquem els CIE y SOS Racismo Cataluña han presentado una queja formal en los juzgados de control del Centro de Internamiento de Extranjeros, CIE, de Barcelona, para denunciar las condiciones en que personas contagiadas de covid-19 han tenido que pasar la cuarentena. Josetxo Ordóñez, portavoz de la Fundación Migra Studium, afirma que los internos han relatado que "las celdas de aislamiento no tenían mobiliario y que dormían y comían por tierra, sin tener tampoco acceso a un lavabo; hay una carencia clara de condiciones sanitarias y de infraestructuras". Unas condiciones que las entidades de defensa de los derechos humanos consideran degradantes y humiliantes para los internos. Por esta razón han presentado una queja formal y piden al departamento de Justicia, el Ministerio del Interior y el Defensor del Pueblo que abran investigaciones por los hechos denunciados.
El escrito de queja, redactado por los abogados de Iridia y Migra Studium, pide que se pueda trasladar a los internos contagiados a lugares adecuados, como hoteles sanitarios u otros centros. Desde las asociaciones por defensa de los derechos humanos se defiende la idea que hay que cerrar los centros de internamiento ante la situación actual de pandemia, tal como ya se ha hecho en otras ciudades como Las Palmas de Gran Canaria, porque no son los dispositivos adecuados para actuar ante una oleada de contagios.
Las entidades también denuncian la opacidad del centro que ha suspendido las visitas familiares y de abogados, como asegura Josetxo Ordoñez: "No puede entrar nadie, ni familias, ni ONGs. Un abogado que no esté expresamente nombrado por escrito y comunicado al director tampoco puede entrar. Nos han vallado el paso, y no nos han dicho por qué".
Ordoñez, que critica la eficacia y la utilidad práctica de los CIES calificándola "de irrisoria", afirma que la reapertura de estos criticados centros tiene mucho que ver con una maniobra cosmética: "Ante el alud de pateras en Canarias y el Levante, hay un esfuerzo para reactivar los CIES para hacer una falsa sensación de control y represión de la inmigración irregular".
El CIE de Barcelona se reabrió, el pasado de octubre, para acoger 81 personas procedentes de Argelia que habían llegado en patera a las Islas Baleares.
