El comisario de los Mossos d'Esquadra, Ferran López, quién era el segundo del mayor Trapero durante los días álgidos del procés ha afirmado que "los Mossos no colaboraron en la preparación ni la celebración del referéndum". López ha hecho esta afirmación en su declaración como testigo al Tribunal Supremo en el juicio contra los líderes independentistas.
Ferran López, quién dirigió la policía catalana durante la aplicación del artículo 155, ha dicho que el cuerpo de los Mossos tenía claro que "el 1-O, lo más seguro es que habría incidentes. La situación era crítica, pero la voluntad política era de llevarlo a cabo a pesar de nuestras advertencias", añadiendo que "(Carles) Puigdemont dijo que si se producían los actos de violencia que preveíamos declararía la independencia de manera inmediata".
El comisario López también ha declarado que "el señor (Joaquim) Forn, respecto a las órdenes recibidas para el 1-O, nunca pidió nada a los Mossos" y que los mandos policiales "preveíamos un dispositivo policial de unos 40.000 mossos para cerrar todos los centros. Tuvimos problemas logísticos para encontrar los precintos necesarios."
Sobre las reuniones previas a la celebración de la consulta independentista con los miembros del gobierno catalán, Ferran López ha asegurado que "la reunión del 26 de septiembre con Forn y Puigdemont tenía como objetivo transmitirles la preocupación por la tensión social que había en Cataluña".
En este contexto, el comisario López ha afirmado que "el día 27 por la tarde le pidió Trapero una segunda reunión a Forn. Nos reunimos con (Oriol) Junqueras, Puigdemont, y (Manel) Castellví. Pedimos también la comparecencia de Carme Forcadell, pero ella no estuvo presente", añadiendo que "les pedimos que cumplieran con la ley y que no hicieran el referéndum."
Sobre el papel de los Mossos durante la jornada de la consulta, Ferran López ha dicho que "los Mossos d'Esquadra estábamos absolutamente dispuestos a cumplir con el mandato judicial" y que "el 1-O no hubo un dispositivo de los Mossos. Hubo un dispositivo único, conjunto y pactado que después, por no sé qué motivo, se infringió".
En este punto, el comisario López se ha quejado que "pedí que trabajáramos todos desde un único centro (con Policía Nacional y Guardia Civil). Posteriormente al 1-O vi que cada cuerpo había actuado en un centro diferente. Si hubiéramos estado juntos nos habríamos ahorrado muchas suspicacias".
López ha sido contundente al afirmar que "en ningún momento nos opusimos al nombramiento de (Diego) Pérez de Cobos como coordinador. Insisto que las reuniones fueron cordiales", añadiendo que "hubo mucho ruido mediático. Yo mismo redacté una nota interna para dejar claro que acatábamos el nombramiento de Pérez de Cobos".
De hecho, Ferran López ha asegurado que "nosotros invitamos a la Policía Nacional y a la Guardia Civil para que se unieran a nosotros y vieran como estábamos trabajando" y que "puede preguntárselo a los 17 mil Mossos; nunca hubo seguimientos por parte de Mozos a la Guardia Civil."
