La caja de solidaridad con la que el independentismo recauda fondos para pagar los gastos jurídicos de sus dirigentes y activistas pasa de manos de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, las plataformas principales del proceso, a una nueva entidad.
Su denominación es Asociació de Foment de la Caixa de Solidaritat y tiene al frente a dos expresidentes del Parlamento de Cataluña: la presidenta será Núria de Gispert (CiU/Demòcrates) y el vicepresidente, Ernest Benach (ERC).
Esta asociación, presentada en el Ateneo Barcelonès este jueves, recibe el testigo en la recaudación de fondos de la ANC y Òmnium, que cifran las aportaciones recibidas desde que empezaron a promover esta iniciativa, en mayo de 2017, en más de nueve millones de euros. Según ha dicho De Gispert, la caja cuenta actualmente con unos tres millones.
De Gispert, Benach y el también expresidente de la cámara catalana Joan Rigol ejercían hasta ahora de auditores de las cuentas de la caja de solidaridad, que como asociación contará también con un notario y dos economistas en su junta.
Benach ha dicho que cada vez hay más afectados y ha ofrecido ayuda a través de la web a quien considere que lo es, si bien también ha indicado que las redes de apoyo local pueden asumir el gasto de la defensa de algunos encausados.
En todo caso, los dirigentes de la nueva entidad han destacado que es importante incrementar permanentemente con aportaciones los fondos de la caja de solidaridad. De Gispert, en este sentido, ha adelantado que "en pocas semanas volveremos a tener muchos problemas".
