La Crida Nacional por la República ha hecho su gran presentación en un acto en el Pabellón del Nou Congost de Manresa en que han participado sus tres principales impulsores: el presidente Quim Torra, presente en el pabellón; el ex presidente Carles Puigdemont, desde Bruselas, y el diputado de Junts per Catalunya, Jordi Sànchez, desde la vecina prisión de Lladoners, a través de una carta.
Ya desde su presentación como embrión, Puigdemont apelaba a la transversalidad de la Crida Nacional por la República: la voluntad de sumar todas las sensibilidades con el horizonte de la independencia. Se trata de un movimiento político y, según los impulsores, es completamente compatible formar parte de él y, a la vez, ser de otro partido.
Unas 6.000 personas han llenado el Pabellón del Nou Congost de Manresa. Unas 51.000 ya se han inscritos, hasta ahora, como socias fundadoras de la Crida Nacional por la República.
Pero ni Esquerra ni la CUP tienen intención de sumarse al proyecto. Habrá que ver si se acaba convirtiendo en un partido político y que papel puede jugar el PDeCAT.
Con el lema "Sumamos personas no siglas" una serie de alcaldes, diputados, y personas anónimas han explicado porque se han hecho de la Crida y han puesto su voto dentro de una urna del 1-O.
Después del acto de hoy, los próximos pasos serán aprobar en una asamblea las ponencias ideológica y organizativas de la Crida. También escoger la dirección.
