El Tribunal Supremo ya ha concretado que necesita hasta la Navidad para ultimar el inicio de la vista oral del 1 de octubre, tal como avanza este sábado La Vanguardia.
Según fuentes del tribunal, el juicio se podría alargar entre dos y tres meses, pero la sentencia en ningún caso llegaría antes de las elecciones municipales, previstas por el 26 de mayo.
La semana que viene la Sala de Enjuiciamiento Criminal pedirá a la Fiscalía si mantiene el delito de rebelión. A partir de aquí se abrirían las diligencias para avanzar en el juicio, que también podría empezar a final de diciembre, pero se encontraría con la Navidad de por medio.
Los cuatro fiscales que han llevado la causa desde el principio están muy convencidos de las tesis que han defendido a lo largo del último año, no sólo en la querella inicial, sino en todas las ocasiones en que se han planteado recursos de las defensas.
También se precisa que habrá una gran cantidad de testigos, que alargarán el juicio hasta las puertas de las municipales. Todo ello, con todavía la posibilidad que Pedro Sànchez pueda avanzar las elecciones generales.
Ante el calendario previsto, por lo tanto, la sentencia llegaría en junio o julio, porque el tribunal no necesitará menos de dos o tres meses más para deliberar sobre las resoluciones y llegar a una redacción definitiva.
