El magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, ha decidido este viernes asumir toda la causa por rebelión, malversación y sedición de todos los ex consejeros de Gobierno y los presidentes de las asociaciones ANC y Òmnium, investigados hasta ahora por la Audiencia Nacional y que se encuentran en prisión preventiva.
Según fuentes jurídicas, la única parte que se queda la juez Carmen Lamela es la que afecta el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, la intendente Maria Teresa Laplana y los colaboradores que en el futuro puedan ser investigados.
De este modo el juez del Supremo asume que toda la investigación sobre el proceso independentista fuera de las vías legales tiene que investigar conjuntamente tal como ya señaló la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela,
De todos modos, el presidente cesado y los cuatro ex consejeros que lo acompañan en Bélgica se mantienen a la espera de las decisiones que tomen las instancias judiciales belgas.