El último presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha sido citado por la justicia de Bélgica para declarar sobre su posible extradición a España, que lo reclama en el marco de la investigación por la posible comisión de delitos de rebelión, sedición y malversación.
La declaración tendrá lugar el día 17 ante el tribunal de primera instancia que decidirá sobre las órdenes de detención y entrega remitidas por las autoridades españolas.
Al igual que Toni Comín, Meritxell Serret, Clara Ponsatí y Lluís Puig, los cuatro miembros de su gobierno que también se encuentran en Bélgica, Puigdemont está en situación de libertad vigilada tras haber sido interrogado este domingo.
El recurso de Junqueras
Por otro lado, el ex-vicepresident Oriol Junqueras y los ex-consejeros Raül Romeva, Carles Mundó y Dolors Bassa han solicitado a la Audiencia Nacional que los deje en lliberat para poder participar en las elecciones del próximo 21 de diciembre.
El recurso presentado por el abogado Andreu van den Eynde, además de referencias al «daño reputacional» y de replicar contra el riesgo de fuga apreciado por la jueza Carmen Lamela, argumenta contra la ocultación de pruebas y el riesgo de reiteración delictiva que ninguno de estos miembros del último ejecutivo catalán «ostenta ningún cargo ejecutivo».
En concreto, Junqueras, Romeva, Mundó y Bassa esgrimen el haber comparecido en la Audiencia Nacional «como ex-miembros del gobierno» de la Generalitat, aunque aseguran en el mismo escrito que «ostentan legítima y democráticamente la condición de miembro del gobierno de Cataluña».
