Javier López Madrid, yerno de Juan Miguel Villar Mir y amigo de los reyes de España, vuelve a estar imputado por el presunto acoso sexual y las amenazas que denunció la doctora Elisa Pinto.
La titular del Juzgado de Instrucción número 39 de Madrid, Belén Sánchez, lo ha citado para que declarae el próximo 26 de julio, una comparecencia que tendrá lugar después de que la doctora Pinto identificara al comisario jubilado José Villarejo como el hombre que la apuñaló en 2014 y le dijo «López Madrid quiere que cierres la boca».
En febrero se había archivado esta misma causa por falta de pruebas. La Fiscalía también consideró contradictorias las explicaciones de la denunciante. La investigación se ha retomado por orden de la Audiencia de Madrid después de la interposición de un recurso de apelación. Una de las nuevas diligencias fue la rueda de reconocimiento durante la cual Pinto identificó a Villarejo, que también está imputado.
A pesar de su condena por las tarjetas black y sus múltiples imputaciones, en casos como los de la salida a bolsa de Bankia, la trama Púnica y la operación Lezo, López Madrid ha conseguido la reelección en la cúpula de la multinacional Ferroglobe, controlada mayoritariamente por su yerno.
Según publica El Mundo, de hecho, un informe de Ferroglobe recoge seis imputaciones de López Madrid y expresa que el consejo de administración vigilará el desenlace de estos escándalos. López Madrid salió del consejo de OHL después de su detención en el marco de la operación Lezo, pero se mantuvo como consejero delegado de OHL y presidente ejecutivo de Ferroglobe.
