El hasta ahora consejero catalán de Empresa y Conocimiento, Jordi Baiget, ha sido destituido de manera fulminante esta tarde de lunes por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. El jefe del ejecutivo catalán ha justificado esta destitución por «pérdida de confianza» a raíz de las declaraciones hechas por Baiget en las que dudaba de que se acabe haciendo el referéndum independentista del 1 de octubre.
El presidente Puigdemont ha nombrado al consejero de Cultura, Santi Vila, como nuevo consejero de Empresa y Conocimiento, pero manteniendo la cartera que ya tenía. El caso Baiget ha abierto una crisis de gobierno en la Generalitat de Cataluña, de consecuencias imprevisibles, puesto que hay otros miembros del ejecutivo que más o menos en público han mostrado sus dudas sobre el referéndum, y uno de ellos ha sido el mismo Santi Vila.
Jordi Baiget, en declaraciones a El Punt Avui había dicho que «probablemente» el referéndum no se podrá celebrar en el formato que ha anunciado el gobierno catalán, por el impedimento del Estado, y que no habrá más opciones que «hacer algo pareciendo al 9N». Baiget ha añadido que no lo preocupa ir a la prisión por la celebración de la votación, pero que no está dispuesto a poner en riesgo su patrimonio personal y familiar.
A raíz de estas declaraciones, la CUP había pedido la cabeza del consejero Baiget, y desde ERC, entendían que el consejero había expresado sus miedos, a pesar de que le hacían saber que sus dudas «no podían frenar» la celebración del referéndum.
La coordinadora general del PDECat, Marta Pascal, por su parte ha apoyado de manera absoluta a Jordi Baiget esta mañana, mostrando su convencimiento total que el consejero se mantendría en el cargo hasta el 1 de octubre. Pascal ha dicho que «el compromiso del consejero Jordi Baiget con el proceso es claro e inequívoco».
