El ex comisario de la Policía Nacional, José Manuel Villarejo, ha afirmado que el gobierno del PP ha utilizado el cuerpo policial con finalidades políticas, en declaraciones al programa Salvados de La Sexta.
José Manuel Villarejo apuntó como responsables de esta guerra sucia al ex director de la Policía, Ignacio Cosidó, y su número 2, Eugenio Pino. Villarejo también ha señalado al director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, así como al gabinete de la vicepresidenta del gobierno central, Soraya Saénz de Santamaría.
A todos ellos les acusa de gestar una trama policial con finalidades puramente políticas, entre las cuales destacaba el desactivar el proceso independentista en Cataluña.
En este marco, Villarejo dijo que no existe una operación Cataluña como tal pero que desde la mayoría absoluta conseguida por el Partido Popular en 2011, desde las cloacas del Estado se trabajó para encontrar casos de corrupción de políticos catalanes, especialmente vinculados al procés.
Una de estas denuncias de corrupción sería la hecha por Victoria Álvarez, ex pareja de Jordi Pujol Ferrusola, contra éste. Dándose el caso que Villarejo viajó a Cataluña para investigar de cerca la familia Pujol.
Sobre estas investigaciones, Villarejo aseguraba que las hizo siguiendo órdenes de Cosidó, y se mostró convencido que el entonces ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, tenía que tener conocimiento de los hechos. El ex comisari, pero, se desvincula de los informes falsos de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) sobre las presuntas cuentas bancarias de Xavier Trias o Artur Mas.
El policía jubilado afirmó que las polémicas grabaciones de las conversaciones entre el ministro Fernández Díaz y el director de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel de Alfonso, las ordenó Cosidó, y que las había filtrado Sanz Roldán, para hacerle daño al ministro del Interior.
Villarejo hizo un repaso por otros temas que él vincula a las cloacas del Estado cómo son el caso Bárcenas, las declaraciones de Ignacio González, la casa real, las irregularidades del caso Yak-42 o la persecución al ex juez Baltasar Garzón.
