La Sindicatura de Cuentas dice que la Generalitat de Cataluña malvendió edificios de su propiedad para conseguir ingresos en 2014. Así consta en un informe que se ha hecho público con las cuentas del Gobierno catalán de aquel año. Según este informe, la Sindicatura constata una pérdida limpia de 38,58 millones de euros en unas operaciones de compraventa de inmuebles hechas por la Generalitat en 2014.
El escrito habla de entre 12 y 18 operaciones en las cuales el importe adjudicado con subasta o de forma directa era menor que el coste de la adquisición. La Sindicatura analiza las operaciones hechas por la Consejería de Economía, que aquel año estaba bajo las órdenes de Andreu Mas Colell, con el grupo asegurador Zurich que compró 13 edificios de la Generalitat por un precio de 201 millones de euros, y que salieron a subasta por 172 millones en segunda opción, puesto que con anterioridad se habían puesto a subasta por 215 millones, a pesar de que quedó desierta.
Los edificios subastados eran la sede del Departamento de Bienestar y Familia, del Paseo del Taulat, y también el complejo de edificios del Departamento de Interior, en el Paseo de San Juan. También se vendieron los edificios de los servicios territoriales de Barcelona de Salud, por 28,48 millones, y de Justicia, por 23,48 millones. En cuanto a la ley de estabilidad presupuestaria la Generalitat de Cataluña no cumplió el 2014 con los objetivos del déficit, la deuda pública y el gasto fijado por el Estado. El objetivo de déficit era del 1% del Producto Interior Bruto y acabó siendo del 2,75%.
