Los Mossos d’Esquadra ya han detenido a tres de los cinco independentistas imputados por la quema de fotos del Rey Felipe VI, durante la última Diada del Once de Septiembre. Aitor Blanc, regidor de Santa Coloma de Gramenet; Ivan Altimira, consejero de la CUP-Capgirem en el distrito de Sant Andreu y el activista Jordi Almiñana, ya están yendo hacia Madrid, para comparecer ante la Audiencia Nacional. La periodista ‘cupaire’ Nora Miralles está a la espera de que los Mossos hagan efectiva la orden de detención que pesa sobre ella, y el activista Roger Santacana, que estaba con Altimira en el momento en el que lo ha venido a buscar la policía, no ha podido ser detenido porque los agentes no llevaban la orden de detención.
Mientras tanto, en una rueda de prensa, la diputada de la CUP, Mireia Vehí, junto con otros parlamentarios de la formación, ha roto una fotografía de Felipe VI y ha pedido la dimisión del consejero de Interior, Jordi Jané. Los anticapitalistas han asegurado que el titular de Interior «actúa a modo de autonomía y no según las circunstancias excepcionales que vive el país«. «El Gobierno tiene un problema de autonomismo y se llama Jordi Jané», ha subrayado Vehí.
Los diputados de la CUP han asegurado que las detenciones de estos independentistas, investigados por injurias a la Corona, pueden ser un «elemento político a tener en cuenta en las negociaciones de todo tipo«, y han insistido en que «el proceso de gestión de las detenciones no ha sido de nuestro agrado, como con el caso de la alcaldesa de Berga, no es manera de proceder en clave de proceso de independencia». Los anticapitalistas también han aprovechado para «responsabilizar al cuerpo de los Mossos d’Esquadra» por las detenciones que están efectuando y han exigido «más valentía» al resto de fuerzas soberanistas.
En este sentido, el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, ha defendido tanto el papel de los Mossos como el de las instituciones, a pesar de que consideran «desproporcionado que se juzgue con esta severidad una quema de fotografías«. Por otro lado, el líder de En Comú Podem, Xavier Domènech, sí que ha lamentado las «detenciones políticas«. Domènech considera que estas detenciones son la prueba de una «judicialitzación de la política constante«.
