Los sueldos de los funcionarios de la Generalitat fueron una vía de enriquecimiento del clan Pujol durante los años 80 y 90, ha revelado el testimonio de un antiguo directivo del banco Natwest Mark, la entidad que gestionaba nóminas de trabajadores de empresas públicas, publica El País.
Según ha declarado ante la Policía, en el marco de la investigación del caso Pujol que dirige en la Audiencia Nacional el magistrado José de la Mata, Natwest Mark entregaba a la Generalitat en efectivo un porcentaje de los rendimientos procedentes de las nóminas, unos pagos que este testigo asegura que se destinaban a pagar «propinas» a altos cargos de la Generalitat pujolista y también a la familia de la entonces presidente catalán.
Además, destaca la misma información, este testigo ha asegurado que «muchos» de los capitales que durante los 23 años de Jordi Pujol al frente de la Generalitat acumuló su familia proceden «entre otros ingresos, por lo que recaudaban a través de la banca». Asimismo, ha detallado que con los beneficios que obtenía el banco con varios productos se pagaba «alrededor de un 3%» a organismos públicos, importes que se entregaban en efectivo.
En cuanto al destino del dinero en efectivo, el testimonio revelado por El País explica que lo conoció gracias a una trabajadora del Instituto Catalán del Suelo (Incasòl). Según el banquero, «se pagaban bufandas» (propinas a altos cargos ideológicamente afines) y también se enviaban en maletas a la calle Ganduxer de Barcelona, donde Jordi Pujol Ferrusola, primogénito del ex presidente catalán, y Jord¡ Puig Godes, hermano del ex consejero Felip Puig, tenían su despacho.
