El pleno del Ayuntamiento de Barcelona en el que se preveía que la falta de apoyo de la CUP frustrara el intento del Gobierno municipal de aprobar una ampliación de 275 millones en los presupuestos, concebida para atender urgencias sociales, ha sido desconvocado.
BComú contaba con el apoyo de ERC y del PSC, pero la CUP, alegando que los presupuestos del equipo de Gobierno que lidera Ada Coláis no son rupturistas, le ha negado el voto a favor, como también ha hecho Ciudadanos.
El aplazamiento decidido por BComú pone de manifiesto la debilidad de su posición al frente del Ayuntamiento, donde suma sólo 11 de los 41 regidores. En cuanto a la votación de los presupuestos, necesitaba sumar sólo un voto más, como mínimo, a los que se había asegurado con el apoyo de socialistas y republicanos.
Los 10 puntos de la CUP
Por su parte, el grupo municipal de la CUP, formado por tres regidores, condiciona la aprobación de los presupuestos a una decena de demandas, según ha publicado El Nacional: la remunicipalización de servicios externalizados, la creación de una red asistencial de derechos sexuales y reproductivos al servicio de la juventud, el impulso del software libre, el desmantelamiento del cuerpo de antidisturbios, el establecimiento de una renta universal para las mujeres que no tienen dinero para vivir dignamente, un carné de ciudad para que las personas sin papeles se puedan empadronar, la recuperación del bus del barrio los días festivos, la supresión de la subvención a las citas deportivas elitistas, la transición a una asistencia social basada en comedores comunitarios sostenida por el apoderamiento vecinal y la creación de un censo de viviendas vacías al servicio de las personas sin hogar.
«Consideramos que lo que no se ha hecho todas estas semanas, no se puede hacer ahora deprisa y corriendo. Y teniendo en cuenta que es una modificación presupuestaria, nosotros abrimos la puerta a que se vuelva a retomar el proceso de modificar las cuentas que se haría durante semanas para que se presenten medidas de emergencia social», ha explicado la regidora cupaire María José Lecha.
