Operaciones policiales, detenciones e imputaciones no han frenado las adjudicaciones de obras de la Generalitat a empresas de la familia Sumarroca, una de las más cercanas al pujolismo y a CDC. De hecho, al día siguiente de la detención de Jordi Sumarroca, imputado por cohecho, blanqueo y delito contra la Administración, la constructora Teyco, de la que fue consejero delegado, se embolsó un contrato de obras en el Vallès Occidental valorado en 111.000 euros (más IVA).
Según revela Economía Digital, VOPI-4 presentó la mejor oferta, pero se consideró «presuntamente desproporcionada o anormal» y la mesa de contratación, encabezada por Josep Antoni Rosell, quien ahora se encuentra apartado de su cargo de director general de Infraestructuras a raíz de su imputación por el caso del 3%, pidió una justificación de la oferta a VOPI-4, que no fue aportada. De ese modo, Teyco obtuvo una obra con una oferta 19.000 euros más cara. Cuatro días antes, Teyco había obtenido un contrato de obras en Tarragona por 130.000 euros (más IVA).
Además, Emte, que forma parte del grupo Comsa Emte, participado por los Miarnau (70%) y los Sumarroca (30%), ganó, concurriendo en una UTE con Acsa, el concurso para las obras de reforma de las oficinas de la Agencia Tributaria en la Zona Franca de Barcelona. Esta UTE recibió la mejor puntuación técnica y global, pero no había presentado la mejor oferta económica.
