La Llotja no se mueve del distrito de Sant Andreu. Después de ocho meses de incertidumbres sobre el futuro de parte de las instalaciones de la sede que la Escuela Superior de Diseño y Arte tiene en el barrio de la Sagrera y de la movilización de los estudiantes, el Ayuntamiento de Barcelona parece haber encontrado el desatascador para que los vecinos tengan el pabellón polideportivo prometido en la calle Camp del Ferro y los alumnos puedan seguir trabajando en los talleres de escultura, talla de piedra, forja, fundición e ilustración.
La solución pactada por el consistorio barcelonés, la Generalitat de Catalunya y la escuela implica el replanteamiento del plan urbanístico proyectado en 2009 por el gobierno de Jordi Hereu. El proyecto contemplaba la construcción de unas piscinas descubiertas y unos vestuarios justo en el trozo de parcela situada entre las calles Berenguer de Palou, Camp del Fero y Pare Manyanet ocupada por los talleres. El acuerdo pasa, según fuentes del distrito de Sant Andreu, por una «reordenación de las piezas dentro del ámbito de la misma parcela», de forma que las piscinas se construirán en un terreno adyacente cedido por el consistorio que salvará de la piqueta las cuatro naves donde estan los talleres. La zona parte afectada será el vestíbulo y una parte de las dependencias de administración de la escuela.
Inauguración el 2007
La previsió de la regidora de Sant Andreu, Laia Ortiz, es seguir el calendario pactado con los vecinos con el objetivo de acabar las obras del equipamiento deportivo a lo largo de 2017. Durante este mes de octubre se dará luz verde a la redacción definitiva del proyecto enmendado con el encargo de que sea «austero», que no supere los 15,5 millones de euros presupuestados inicialmente y que, al mismo tiempo, garantice la calidad de los espacios y facilite el mantenimiento posterior. La construcción del polideportivo es una vieja reivindicación del barrio de la Sagrera y tanto las entidades vecinales como los clubes deportivos han tomado parte muy activa en la definición de los usos de la futura infraestructura.
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