La suspensión durante un año de las concesiones de todo tipo de licencias de alojamiento turístico en Barcelona, anunciada este jueves por la alcaldesa, Ada Colau, afecta a una treintena de licencias en trámite y a un puñado de proyectos que aún no han solicitado una.
Entre los proyectos que quedan congelados está la conversión de la Torre Agbar en un hotel de la cadena Hyatt, prevista por Emin Capital, que aún no había pedido la licencia, y el del hotel que quiere levantar Javier Faus, el vicepresidente económico del FC Barcelona en los últimos años, en el edificio que fue la sede de Henkel Ibérica, ubicado en la calle de Córcega.
Donde está este último edificio, adquirido por 15,5 millones de euros por Meridia Capital, el fondo de inversión de Faus, se tenía que levantar un complejo de 15.000 metros cuadrados con un hotel de cuatro estrellas con 182 habitaciones por el que ya se había pedido una licencia.
El Gobierno municipal de Xavier Trias había avalado el proyecto, que defendía aduciendo que dinamizaría la ciudad, pero los vecinos lo rechazan porque los consideran un exponente de un modelo de ciudad basado en la especulación inmobiliaria y el turismo.
Entre los otros grandes proyectos hoteleros que aún no tienen licencia y que no la podrán obtener a corto plazo también está el de la Magòria y el del lujoso hotel del grupo inversor KKH en el edificio Deutsche Bank, en Diagonal-Paseo de Gracia.
Colau, que tildó la medida de «preventiva, cautelar y provisional», sostiene que la moratoria servirá para ordenar un modelo que considera que pone en riesgo el propio modelo.
