La última modificación de las condiciones laborales de los trabajadores del FNAC, y por la cual salieron a la calle el Sant Jordi pasado, estaba injustificada. La empresa había intentado justificar los recortes con unas previsiones económicas hechas a partir de unos cálculos que no se vinculan a cifras específicas y que son poco rigurosos, según la sentencia emitida el 15 de julio.
Una parte de la plantilla de la FNAC de plaza Cataluña de Barcelona salió a la calle el 23 de abril para protestar contra las nuevas condiciones. Una de ellas era la pretensión de eliminar el copago de la mutua sanitaria que hasta el momento asumía la empresa.
La Audiencia indica que la intención de FNAC era «empeorar» las condiciones de los trabajadores en la medida que la empresa «mejora», sin ningún dato objetivo que justificara el cambio de distribución.
La sentencia condena a la empresa a volver a las condiciones que tenían los trabajadores antes de los cambios impuestos sin justificar. FNAC tendrá que pagar pues el 100% del seguro médico.
